Filmado en un rancho y en una academia de equitación, estos Fuckeroos honorarios intentan demostrar sus habilidades con la silla montando pollas de diversas formas e intentando superar al bronco que tienen debajo antes de que les pinten la cara de blanco como payasos de rodeo.
Michelle B. es delgada y rubia, tiene grandes tetas y le encanta chupar pollas, así que ¿por qué no es una estrella más grande? Aún no ha abrazado el acto del sexo anal con todo su corazón. Tienes que meterle los nudillos en el ano e ir despacio cuando se lo folles... ¡algún día espabilará y abrirá de par en par ese puto ano para todo el mundo!
Cherokee es en parte india nativa americana y todos sus antepasados eran grandes jinetes. No sabe montar ni de coña y le da miedo siquiera intentarlo, pero su culo y su boca son capaces de albergar más seres vivos que la media de los tee-pee, ¡así que tal vez tenga algunas habilidades que valgan la pena después de todo!
Hemos tardado tres escenas en llegar a Tyla Wynn, pero por fin tenemos el tipo de zorra de lado que nunca se pone dolorida. Puedes cabalgar sobre su culo hasta la puesta de sol, porque aunque tú y todos tus amigos os turnéis para follároslo, ¡el borde nunca se romperá!
Kinzie Kenner se afeita el coño como si lo esquilara para obtener lana. Esa piel rosa está servida bien alta para que su hombre pueda follar sobre ella. Es fundamental follar hacia abajo a una mujer si quieres hacerle el máximo daño, porque la gravedad puede ser muy difícil de superar si la dejas que se ponga a tu lado.
Tiffany Holiday se siente a gusto con los huevos de un hombre colgando de su barbilla mientras le da huesos en la boca. La razón es sencilla. Tiene un culo demasiado pequeño y sabe que en cuanto le saque la polla de la cara, le meterá la polla en un sitio más travieso.