¡Lethal Hardcore presenta a las chicas más calientes aprendiendo a comer coños como una mujer! Cougars Crave Kittens 14 tiene más de 3 horas y media de metraje hardcore en el que adolescentes ingenuas son corrompidas por lesbianas mayores cachondas. ¡Porque a veces sólo un puma puede dar rienda suelta a la proeza animal que se esconde dentro de la gatita!
Cuando Pristine Edge se ofreció a comprarle un bolso a Ashley Adams, no sólo estaba siendo amable, ¡quería probar su dulce coñito rosa! Ashley aceptó encantada la oferta: ¡no todos los días tiene la oportunidad de follarse a una lesbiana mayor y caliente! Cuando vuelven a casa de Pristine, las chicas se quitan la ropa y se comen sus dulces coños hasta alcanzar el clímax con una tijera.
Cuando Cadence Lux se quejó a Nina Elle de que nunca tenía orgasmos, Nina supo que sólo su experiencia podía darle a Cadence sus primeros orgasmos. Después de desnudarse la una a la otra, asegurándose de hacerlo de forma muy sensual, Nina acarició la galleta de Cadence con la punta de los dedos hasta que Cadence se puso a cremar de placer. Por supuesto, Cadence tuvo que devolverle el favor comiéndole el coño a Nina como una buena putilla.
Ally Brooks siempre ha querido estar con una mujer mayor, pero no tenía ni idea de dónde encontrar un puma al que acariciar. Cuando Ally se enteró de que Krissy Lynn solía morrearse con la propia madre de Ally, ¡sabía que tenía que conseguirlo! Krissy no tuvo problemas en coger a esta gatita y adiestrarla en todas las formas en que las lesbianas pueden amarse, y también en introducirla en unos cuantos fetiches. A los gatos les encanta lamer cosas, desde las tetas hasta las rajas, ¡e incluso los dedos de los pies!
La sexy adolescente lesbiana Alex Little está dispuesta a todo para ser animadora. Pero cuando se entera de que puede que no entre en el equipo, concierta una cita privada con la entrenadora, Stevie Lix, para convencerla de que es lo bastante buena, ¡incluyendo lamer y chupar las tetas y el coño de la Srta. Stevie! Alex soporta que la Srta. Stevie le meta los dedos con rudeza y profundidad, ¡pero vale la pena para ser la mascota de la profesora!